jueves, 27 de octubre de 2016

ADIDAS KANADIA TR7: La calidad no es cara

ADIDAS KANADIA TR7: La calidad no es cara

Me consta que hablar de zapatillas es un asunto "muy controvertido", lógicamente todos los corredores de trail somos distintos, en pisada, peso, carencia de zancada, incluso los terrenos donde entrenamos son muy diversos o las condiciones climáticas son distintas para uno mismo dependiendo de la estación que nos encontremos, por lo que la opinión de una zapatilla concreta puede variar radicalmente en función de dichas variables.

Mi análisis de estas zapatillas lo he realizado después de correr 1.400 kilómetros a lo largo del pasado verano. También parto de la base que en mi caso particular soy  un corredor de 65 kilos, con una pisada relativamente neutra y  marcada en metatarsos sobre todo en subidas y llaneos. La mayoría de los kilómetros han sido recorridos por senderos en córdoba, lo que significa, entrenamientos a una temperatura media superior a los 30º,  y con un terreno seco totalmente, arenisca suelta en el peor de los casos y bajadas inferiores a 500 metros de desnivel, con subidas entre el 10 y el 25%  y una distancia máxima de 3 kilómetros.

A partir de ahí os quiero dar mi opinión  personal ¡¡¡¡


PRECIO
De partida estamos hablando de una zapatilla de perfil bajo dentro de la marca ADIDAS, orientada a corredores que se inician o para rodajes, aunque como veremos estamos hablando de una zapatilla relación calidad precio excelente. 

Su precio de mercado oscila entre los 60€ y 50€ puesto que la marca para el pasado verano ya tenía en el mercado la versión 8.


AMORTIGUACIÓN
Es una zapatilla de 290 gr. lo que indica de inicio que es una zapatilla ligera, pero con un drop 8, situándola  en el mercado dentro de las zapatillas con una diferencia respetable de talón respecto a los metas, contando con una media suela y una amortiguación de EVA. 

 Esta amortiguación en los propios metas es  de 2 cm. suficiente para transmitir en mi opinión una  sensación agradable, considerando  que va perfecta en la parte de talón incluso tras un dilatado uso, la respuesta de la EVA es muy constante con un deterioro de la misma muy leve.

Puedo asegurar que no he sentido ninguna incomodidad, aunque en la zona de metas si se va notando el uso aunque de forma ya más acusada en los últimos rodajes.


DURABILIDAD

Que puedo decir de unas zapatillas que me han permitido sacarle 1.400 K. El desgaste se ha producido de forma muy paulatina en términos generales. La zona de contacto con el suelo es increíblemente duradera y las zonas de mayor fricción con el pie como puede ser en los terminales de los dedos en su parte interior o la zona de tobillos se ha mantenido el tejido en muy buen estado.

Estamos ante una zapatilla indestructible, tolera todo tipo de usos y terrenos. 






BAJADAS Y AJUSTE EN PIE


Es sin dudas su punto débil, su falta de protección salvo las líneas trasversales ya clásicas de ADIDAS  y una superficie demasiado  estrecha de talón, con tan solo 83 milímetros, se hacen difíciles de manejas  en bajada, y si se le exige  ritmos rápidos  transmiten inseguridad. 

A parte, que toda la zona del empeine y la lengüeta no dan una sujeción buena. En mi caso  la lengüeta tienden a  desplazase lateralmente. Nunca llegas a tener la sensación de pie recogido.
(Análisis en terreno seco y duro con superficie de arenisca y piedrecillas sueltas)




SUBIDAS

En este apartado ofrece  buenas prestaciones, su adherencia en el terreno y su ligereza son óptimas siempre y cuando entres de metas en la subida.

La zapatilla cuenta  con  111 milímetros  en su parte delantera considerándolos  más que suficientes para conjugar adherencia, estabilidad y  ataque.








RODAJE


Su punto fuerte sin lugar a dudas, como he referido anteriormente sus  290 gr. Te permiten ir muy cómodo, prácticamente sensación de zapatilla de gama alta, ofreciendo  una respuesta muy equilibrada y nada que ver a sus hermanas anteriores, aquí es donde más diferencia he percibido de la 6 y sobre todo la 5.

Esta zapatillas para senderos corribles y bosque son una maravilla ¡¡¡


LA SUELA Y ADHERENCIA EN ROCA


La Tecnología Adidas traxion es la empleada en esta zapatilla, sin ser de las mas reconocidas, puede decir que es una auténtica pasada, porque como podéis aprecias en la imagen el desgaste es mínimo para los kilómetros recorridos, y sus prestaciones, tanto en roca como tierra es excelente, por realizarse la prueba en verano no he tocado roca mojada prácticamente salvo circunstancialmente por lo que no la puedo juzgar su comportamiento en ese terreno pero en el resto diría que son más que notable.






IMPERMEABILIDAD Y TRANSPIRABILIDAD
Pues sencillo de juzgar, considerando que las he utilizado en Córdoba con temperaturas extremas superando algunos días olgadamente los  40º en el ambiente,...... imaginaros la temperatura que alcanza el terreno, ..... pues en ningún momento he tenido sensación de quemazón o sudor en los pies, como si los sufrido  en otras zapatillas  y de qué manera en verano. El tejido de la zapatilla permite buena ventilación y una  mediasuela que no transmite la temperatura.


FLEXIBILIDAD  Y TORSIÓN LATERAL
Esta zapatilla por su estructura a mi entender es  rígida y una escasa torsión, motivo por el cual se acentúan sus carencias  en las bajadas donde necesitas una mayor adaptación al terreno. Se puede mejorar este aspecto considerablemente en próxima generaciones. 

Conclusión: Recomendable para entrenamientos poco técnicos y pos zonas fáciles, sin dificultad técnica a un coste más que económico ¡¡¡, siempre en terrenos secos y para volar por senderos. 


JOSE A. CUEVAS - @CUEVASTRAIL


martes, 4 de octubre de 2016

DEBUT EN ULTRATRAIL





La previa

Tres años y medio después de mi primera carrera de trail me he enfrentado a mi debut en Ultras. En este tiempo he corrido más de 30 carreras por montaña, de diversa distancia y muy distintos terrenos, y tras pensarlo muy bien tomé la iniciativa de afrontar el Reto, la elegida era ULTRA DE GREDOS, entre los motivos era la dificultad técnica, lo atractivo de la zona y su distancia .

Con esa base base deportiva, me planto 12 semanas antes de la carrera, con algunas molestias que me persiguen desde el mes de mayo en el aductor derecho, incluso las dos semanas iniciales solo me puedo limitar a hacer CACO, pero poco a poco me voy liberando de esas molestias y consigo ir cumpliendo con lo planificado, al final son  más de 43.000 metros los ascendidos en 1.100 k. empleando más 130 horas de entrenamiento para ello, la semana de antes las sensaciones son inmejorables, siento fluidez y percibo haber llegado en un buen momento, sin molestias serias y con fuerza.

Los nervios van apareciendo y con el gusanillo metido en el cuerpo me  presento con mi familia en Candeleda a pies de Gredos, un pueblo de Ávila en la vertiente sur junto al rio Tietar, era el día antes de la carrera y nos encontramos con una magnífica temperatura para las fechas que son, por encima de los 25º, incluso después del almuerzo  nos dirigimos a las piscinas naturales del pueblo situadas en la garganta de Candeleda  para refrescarnos y disfrutar del paisaje.


La tarde previa a la carrera avanza dedicándonos a recoger la bolsa del corredor y los dorsales con mi compañero de club,  poco después nos dispusimos a ir a la charla técnica donde me encuentro a Toni y su compañero, conocidos de la subbética. El pueblo poco a poco va cogiendo ambiente de carrera y la plaza donde se tomará la salida es un hervidero de ir y de venir de corredores, la tensión crece.


  Inicio de carrera

A las 3:45 suena el despertador y con todo preparado me dirijo con un caminar lento a la salida que está a escasos 3 minutos del Hotel donde estaba hospedado. El silencio en la salida era conmovedor, nada que ver con las salidas que he vivido hasta ahora, casi nadie hablaba y el que lo hacía era de forma tímida, caras muy serias, ni si quiera se percibía los más mínimos movimientos de calentamiento .... ”Como si nuestro cuerpo percibiese lo que nos esperaba”……se pasa rápido esa espera, y sin darme cuenta estamos en marcha, salimos por las escasas calles de pueblo dirección a la pista.

El camino coge rápido desnivel y decido colocarme en un grupete de cabeza con 6 o 7  corredores, el ritmo es cómodo con buenas sensaciones, me voy dando cuenta que todo va bien de inicio, quedaba un mundo pero no iba a ser cobarde no es mi forma de correr, pienso que ya tendré tiempo de echar el ancla.  A los pocos kilómetros abandonamos la pista forestal para coger un sendero relativamente limpio con alguna piedra pero estaba muy pisado resultando fácil mantener un ritmo vivo incluso siendo de noche. Vamos avanzando por la parte alta del río que se escucha en la noche  hasta que llegamos al puente romano que nos permite acceder a Puerto Candeleda para posteriormente llegar al primer avituallamiento en la Albarea. 

En ese punto vamos  4 corredores y surge el primer problema en carrera, han desaparecido las balizas y debemos seguir con la navegación del GPS. Menos mal que tenía el track cargado sino habría sido imposible seguir adelante, me tranquilizo y vamos subiendo por una empinadísima pista. Prácticamente nos encajamos hasta el siguiente avituallamiento sin ninguna baliza, todas robadas, son casi 7 kilómetros con la noche totalmente cerrada y 1.200 metros positivos, pero vamos avanzando sin demasiados problemas tan solo un par de despistes subsanados rápido, Sigo en 2ª posición muy cerca de Garai que lidera la cabeza, y ya no consigo ver ninguna luz por detrás.

Ya en el avituallamiento de Puerto de Candeleda me detengo solo a rellenar los botes, llevaba en las piernas 1.750 metros positivos en los primeros 15 kilómetros, reanudo la marcha rápido para acelerar algo el ritmo, las sensaciones son aún mejor que antes, iba impecable y ya con algo más de dos horas de carrera, aunque el viento va creciendo y me encuentro la primera pedrera justo antes de coronar el Morezón a 2,389 metros de altura esperando varios voluntarios en la cima y animando.

Según lo estudiado tenía que afrontar un descenso cómodo, pero nada de eso, es todo lo contrario, ... la primera bajada de la carrera dirección al Circo de Gredos me hace darme cuenta que aquello iba en serio, el primer tramo transcurre sin sendero apreciable, te vas descolgando de piedra en piedra hasta alcanzar una vereda sobre roca muy desfragmentada de muchos tamaños, y aún con la noche cerrada se me hace imposible disfrutar del paisaje, los traspiés son continuos y avanzo con muchos gasto  hasta llegar al tercer avituallamiento de la carrera, el Refugio Elola, 


Refugio Elola

Nos reciben un nutrido grupo de voluntarios a pie de la Laguna Grande y el día empieza a clarear. Dos amables muchachas me rellenan los botes y tras comer algo de chocolate y fruta emprendo el ascenso a la segunda subida de la carrera. Saliendo del Refugio, aún  comiendo me encuentro a Garai que lideraba la carrera con dudas por donde seguir, nos reorientamos  y nos ponemos los dos a subir por una pared corta pero durísima, prácticamente escalando en algunos tramos hasta llegar a la cima y encontrarnos de bruces con el Gargantón. 

Gargantón ¡¡¡ menuda bajada, puff….el descuelgue por piedras se sucede durante un par de kilómetros, no sin antes superar un tramo con cuerdas y zonas encharcadas. Pierdo algo de  tiempo pero sin importancia. Arrancamos nuevamente juntos la ascensión a   Cabeza Nevada, la cima de la carrera a 2.427 metros de altura por una pared de roca tremenda, el ritmo es constante el que ponemos, incluso decido ir comiendo y bebiendo bien, llevamos a esa altura de carrera más de tres mil positivo en tan solo 30 kilómetros y por delante quedaba mucho aún. Para mi sorpresa cuando llegamos arriba los voluntarios nos advierten que vamos en tiempo de récord de la prueba.

En la Bajada de Cabeza Nevada me enfrento a mi primer momento de debilidad, no solo pierdo de vista a Garai, sino que sufro mucho, el canchal de piedra es insufrible, bajamos casi 900 metros negativos por rocas de salto en salto, y para colmo cuando vislumbro algo de llaneo es un cervunal  o una pradera llena de agujeros que no se ven y están encharcados, mi temor de caerme o lesionarme es mayor que las ganas de imprimir un ritmo fuerte, se me va haciendo largo el tramo y de regalo antes de llegar al puente de Roncesvalles un descenso muy corto pero peligrosísimo me remata… 

Por fin llego al puente y me da caza el tercer clasificado, es uno de los dos puntos de inflexión del Ultra, desde ahí hasta la cima de la Mira quedaban 14 k. al 8,5% de media de pendiente subiendo con una parada en Plataforma de gredos.  Ese tramo lo tenía en mente como clave para apretar, pero la primera parte de la subida era un sendero muy sucio de vegetación y quebrado, infinidad de piedras fracturadas, es el típico tramo que correr es casi imposible pero ir andando también transmite  la sensación de ir lento, por lo que lo voy alternando con un CACO  ágil.  En los tramos que apretaba mi eventual compañero flojeaba aunque no decido marcharme en la subida  porque quedaba mucho. 

Tras 7 k. de una subida pesada nos plantamos en el ecuador de la carrera con un tiempo de 6:30 a escasos 7 minutos de la cabeza de la misma y ya me encuentro nuevamente con mejores sensaciones, la parada es rápida y seguimos subiendo, esta vez la salida de Plataforma de Gredos es por una calzada de piedra ancha con abundante público hasta alcanzar un sendero que nos llevará a la Mira,  en un par de kilómetros conectamos con el recorrido de la carrera del Medio-Ultra.


Esto te da un plus de motivación, vas adelantando corredores por un cresteo de algo más de 3 k.  muy incómodo, me recuerda al que tenemos en los Riscos en Córdoba pero muchísimo más largo, hasta llegar al cono del Pico de la Mira a 2.343 m. es el pico que jalona los Galayos, allí corono con mi compañero de carrera pero en la cima cambia el ritmo de forma brusca y se tira para abajo como un tiro, yo decido hacer la bajada a mi ritmo, no quiero arriesgar, en mi mente solo estaba “no me la juego ahora”….. pero de repente me encuentro una cornisa en lo alto del precipicio que te lleva el Refugio Victory, ……entre lo realmente difícil que se hace bajar por allí y la cantidad de corredores de la corta que no avanzaban se me va bloqueando la mente, es con diferencia el peor momento de carrera.

     

           Los Galayos

El bloqueo no solo por perder la segunda posición sino que no tenía forma de avanza por aquel “estripabichos”.  A duras penas alcanzo el  Refugio y tras un amable voluntario que me ofrece un acuarius que por cierto me entra como si fuese la mejor cerveza del mundo en agosto, continuo la bajada por el “zis-zas” de roca por un terrible acantilado hasta llegar al arroyo, el camino empieza a coger forma y permite abrir la zancada algo, me voy recomponiendo y conforme voy adelantando corredores de la corta mi sensación mejora hasta llegar a plataforma de Nogal del Barranco.

Nogal del Barranco es el avituallamiento situado en el k. 55, aún quedaban 27 kilómetros, por lo que me lo tomo algo más tranquilo, me informan que cabeza de carrera va ya a 15 minutos y el segundo me saca 10, me doy cuenta que he penalizado mucho tiempo en la bajada, pero realmente voy ya animado, un tercer puesto es un gran botín y decido comer muy bien, ahora tocaba defenderse y no petar.

Reanudo la marcha por una carretera de montaña hasta llegar a un desvío penetrando en un sendero con una pendiente brutal, el sendero estaba lleno de zarzas y vegetación espesa, era realmente molesto avanzar por allí pero voy disfrutando....... hasta coronar en una pista forestal muy amplia donde me pongo a correr a un ritmo constante, mentalmente iba fuerte y con ganas.


Arbillas y los Rasillos, fin de carrera


Tras unos kilómetros por la pista nos meten por un par de cortafuegos para perder altura   dirección al avituallamiento de Arbillas, en eso zona me aparece unas molestias en el empeine que se acrecientan en las bajadas. Volvemos a retomar otra pista de asfalto hasta llegar al avituallamiento, el resultado de esos 10 últimos kilómetros no era malo y soy consciente que a ese ritmo es difícil que me alcance nadie por atrás, decido seguir bebiendo muy bien porque ya caía más de 30º a las dos de la tarde, comer ya me cuesta un mundo, era el k. 65 y voy notando mella en mis fuerzas, me tomo entonces un respiro para comer y hago un km de subida andando mientras tomo una barrita, para volver a iniciar mi marcha corriendo a ritmo muy vivo dirección a Rasillo.


Me quedaban todavía 10 k. de subida hasta allí por pista y 600+, y en ese tramo voy alcanzando a muchos corredores de la corta ya con cansancio acumulado y de repente entre ellos aparece el 2º clasificado de la prueba con un correr muy lento, por lo que decido cambiar de ritmo a apretar, quedaba más de 30 min, hasta el siguiente avituallamiento pero lo realizo a tope, a lo que doy para abrir el máximo hueco posible con él, y ya me empiezo a creer en mis posibilidades de pódium.

Mentalmente y de fuerza iba muy fuerte, notaba que estaba con el depósito de energía lo suficientemente lleno como para llegar hasta meta a tope, era consciente que petar sería casi imposible por lo que alcanzo el último avituallamiento en el Rasillo para beber bien, tomar fruta, con la sorpresa que me advierte que cabeza de carrera va cerca, a escasos 5 o 6 minutos, aún quedaban 8 km hasta meta por lo que me la juego y desde ahí pongo un ritmo por debajo de 5, era 2 km de subida y una bajada por una pista hasta el pueblo corriendo todo lo que puedo y más .....pero siendo sincero me mente estaba puesta más en que no me pillasen por atrás que alcanzar a Garai.


Finalmente entro por las calles de Candeleda y por primera vez en una carrera me emociono realmente, había intentado contactar con mi mujer pero el teléfono no funcionaba y no sabía si me esperaba en meta, hasta que entro en la plaza del pueblo.....y mi niña corre en mi dirección, la cojo y atravesamos la línea de meta, tras  11 horas y 8 minutos después de haber salido estaba con ellas dos y con un segundo puesto en la saca, que jamás habría soñado y ni muchos menos planificado, y con el regalo de haber rebajado el récord de la prueba de años anteriores y a escasos 3 minutos del vencedor. 

Solo me queda dar las Gracias a los Voluntarios, a una gran organización, a mi princesa y a mi mujer que sin ellas sería imposible, a toda mi familia,  sin olvidar a Manu Hurtado,   los "jamountain's" y mi club Corduba Trail.