domingo, 10 de marzo de 2019

50 MILLAS SIERRAS DEL BANDOLERO, VICTORIA PERSEGUIDA


Era la 3 vez que me disponía a ponerme en la salida de la Bandolerita, las dos ediciones anteriores fueron muy complicadas climatológicamente hablando y a priori podría ocurrir lo mismo en esta edición, a la postre la carrera transcurre por las sierras con mayor índice de precipitación en España, echo que condiciona siempre la preparación, no solo la condición física sino también la mentalización a enfrentarte a unas condiciones exigentes. Bandoleros no es un ultra montañero, ni si quiera de un gran desnivel, pero su terreno de roca caliza y su clima lo convierte en una carrera dura.


Por otra parte, en mi caso ya han pasado más de 6 meses sin disputar una ultra, desde Valle de Tena no quise competir nada en larga distancia y resetear la mente, se sufrió mucho allí tras venir de un abandono en Somiedo y aunque físicamente estaba bien, psicológicamente había perdido mucha capacidad de competir larga distancia, por lo que los meses anteriores me centre en correr maratones y algunos trail cortos. Poco a poco he ido recobrando la mentalización y ya las semanas previas a la ULTRA estaba deseando de ponerme el dorsal y exigirme al máximo a mí mismo.

LA PREPARACIÓN

Sinceramente el proceso de preparación a las 50 millas comenzó las semanas posteriores al Maratón Alpino de Jarapalos a finales de Noviembre, último objetivo de la temporada pasada, pero antes he de reconocer que no volveré a competir una carrera sin estar totalmente motivado para ponerme un dorsal, porque a principios de diciembre me plante en la Falco, que era campeonato de  España de la FEA, y duré menos que una pompa de jabón, en definitiva, si la mente, tus piernas y tu descanso no van al unísono ahórrate el viaje, el resultado está claro, petardazo gordo y para casa, menos mal que lo pasamos de lujo en la expedición de agregados del Club Nerja, jajajaja.



En líneas generales la preparación específica de las últimas 12 semanas me ha llevado a correr más de 1.200 km. con algunas horas adicionales de gin y como aditivo han sido 45.000 metros de desnivel positivo distribuidos en entrenamientos de todo tipo, pese a que esta carrera no se distingue por ser una carrera con desnivel, pero su terreno técnico te exige al máximo, y quizá la preparación de fuerza ha sido esta vez más fundamental que los km. o el desnivel.

En cuanto a carreras de preparación, comencé compitiendo en Huelva en copa andaluza de CxM, con un resultado muy discreto y muy falto de todo, a continuación en Álora que era campeonato de Andalucía de Trail FAA, ya tenía mejores sensaciones pero me encontré con corredores ya muy fuertes y me resulto imposible mantener el ritmo que me impusieron, con un 4 puesto en el campeonato a dios gracias que llegue a meta porque por momentos me sentí destrozado en carrera, y por último quise meter una carrera específica en cuanto a terreno técnico, corriendo los 30k. de Sierra Blanca en Marbella, que aun llevándome la victoria un esguince en mi tobillo derecho ha marcado la preparación de las 2 últimas semanas arriesgando mucho para llegar en condiciones a disputar BANDOLERITA.

LA PREVIA
Bandoleros arranca siempre en sus días anteriores con un inquietante seguimiento de la climatológia, estando pendiente de la meteo en todos los canales de tv, internet, etc. Aunque al final acabamos haciendo la maleta con todo el armario … jajajaja … pero no sé cómo, que al final se queda algo atrás en cada carrera, esta vez le toco quedarse en tierra mis manguitos que menos mal que no hicieron falta sino tenemos que hacer allí unas compras de última hora.



Todos los que hacemos las 50 millas, es de obligado cumplimiento estar el viernes a las 18 horas para ver salir las 100 millas, ver el juramento bandolero, vivir ese ambiente tan especial, tan andaluz, tan particular que se genera en Prado del Rey, para cualquier corredor de fuera de nuestra tierra debe ser sobrecogedor, dando esa salida Chito entre el humo de la pólvora y de fondo la banda sonora de la carrera te hace salir volando y sentirte especial.

Este año me aloje en el Bosque, un pueblo que da entrada al Parque Natural el cual es atravesado 2 veces por la carrera, he de decir que es precioso. Ese viernes previo a la carrera comimos allí toda mi expedición, patricia y mi niña, mi cuñada Laura y David, con el “Chileno” o mejor dicho el misil andaluz y su pareja Rocio donde se nos agregaron los “OCHOA BROTHER’S” …. Buen rato pasamos todos de risas y dimes y diretes, jajajaja. 





“LA SALIDA”
La carrera en mi caso la divido en 3 partes, la inicial hasta el Boyar donde las posiciones se van cogiendo poco a poco y sirve para conocer cómo se afrontará realmente la carrera. Un segundo sector que para mí el que salé de allí primero tiene un 90% de la carrera ganada, puesto que es el tramo técnico y duro que va hasta Grazalema. Y por último el regreso a meta que sin desnivel positivo prácticamente aunque ya van las piernas muy tocadas y la concentración debes mantenerla para no caer en la desidia.

“PRADO DEL REY – PUERTO EL BOYAR”
Desnivel +:   1.685 m.
Desnivel -:    1.021 m.
Distancia:     29,5 Km.
Tiempo:        2:43:26

Arranca el sector con un tramo hasta el Bosque con 12 km. de tendencia descendente para iniciar desde allí las primeras rampas de subida de la carrera que nos dirigirán hasta el puerto. Los primeros kilómetros de la carrera entre que Chito nos acompaña con la moto y una buena grupeta que se forma vas entretenido pero rápido se acaba la diversión y la cabeza de carrera transita a un ritmo muy vivo marcado por Pastorico, ya se habla más bien poco o nada …. Jajajajaja, mis sensaciones he de reconocer que eran perores que el año anterior y noto molestias en el glúteo derecho, no soy capaz de ir cómodo en el grupo cabecero, en poco más de 47 minutos hacemos la entrada en el Bosque entre un gentío enorme, consigo relajar un poco y rápidamente en las primeras rampas toma la iniciativa del grupo Jose A. Castilla y tres corredores más nos ponemos detrás de él, esta parte inicial de ascenso es por un sendero muy estrecho hasta que llegas a una pista que rodea el pico Albarracín, paso a paso me voy metiendo en carrera y sintiéndome más cómodo.

Ya en las cercanías del avituallamiento del Llanos del campo por una subida técnica tomo por primera vez la iniciativa en carrera, vamos abriendo algo de hueco con nuestros perseguidores, aunque aún es casi insignificante, en ese avituallamiento nos recibió muchísima gente, y pese a que se realiza muy rápido salimos con los ánimos reforzados y el terceto de cabeza de carrera que formábamos nos mantenemos unidos hasta llegar al Avituallamiento del Boyar.


En esta subida continuada de algo más de 6 km. noto por primera vez unas buenas sensaciones y sin ir demasiado rápido el ritmo es ágil. Conforme subimos por el sendero nos apartamos para saludar y dar la enhorabuena al Lider de las 100 millas ((vaya tío más valiente)), y algún otro corredor que van directos ya para meta. Mi sensación es de tener a esa altura de carrera la situación controlada, puesto que lo planificado en mi mente era tal cual como estaba ocurriendo y lo siguiente era cambiar el ritmo en la zona del simancon, pero hasta entonces quería que pasasen los kilómetros, guardando un punto y ciertamente nadie me apretaba más de la cuenta.


“PUERTO EL BOYAR - GRAZALEMA”
Desnivel +:   1.285 m.
Desnivel -:    1.557 m.
Distancia:     25,12 Km.
Acumulado: 54,12 km.
T. Tramo:      3:21
Tiempo:        6:04:12

Tramo donde se deciden estas 50 millas, en escasos 25km. está todo el terreno técnico con dos bajadas que marcarán mucho y dos subidas decisivas, tras llegar a la zona del endrinal en la base del Simancón, decido poner un punto más en la subida y sin despegarme demasiado de mis perseguidores voy notando que llevo algo más de ritmo y al coronar vuelvo a dar otra vuelta de tuerca.

En la bajada técnica decido arriesgar algo más y me pongo en dirección al Navazo, en ese tramo se jugaba la carrera y tenia ya que jugar mis cartas. El apretón me costó pegar un golpetazo en la zona más fácil, justo en una pequeña pradera, pero sin daños aparentes sigo mi marcha para afrontar la famosa bajada a Villaluenga del Rosario. En varias ocasiones giro la cabeza y no veo a mis perseguidores, justo en el collado que da acceso a la bajada peligrosa la visual me permite tener una amplia visión y compruebo que he metido más de 3 minutos ((lo había cronometrado ese tramo para ir teniendo alguna referencia real, y valorar si arriesgar más o menos en la bajada)). En plena bajada tengo que sortear a un grupo de senderistas muy numeroso poniendo la guinda, toco bajarla con piedra seca y al comprobar que tenía algo de ventaja me presento en Villaluenga sin arriesgar mucho.

Esta edición al cambiar el avituallamiento me encuentro algo desorientado pero finalmente llego a un polideportivo donde me esperaba mi mujer y mi niña dándome muchos ánimos, consigo entrar en el polideportivo en 4 horas 25 minutos tras 41 km. mi sensaciones eran infinitamente mejores que el año anterior que llegue desfondado, realice un avituallamiento muy tranquilo comiendo bien y tras 2 o 3 minutos reemprendo la marcha buscando la subida a la charca verde, desconocía la diferencia real con mis perseguidores pero no me preocupaba en exceso porque iba corriendo fácil y tenía que afrontar todavía un terreno que a mí particularmente me gustaba.

La subida me la tomo con calma alcanzando corredores de las 100 millas incluido a mi buen amigo y respetado Antonio Roldán que tras algún comentario en broma sigo subiendo sin prisas, pero avanzando firmemente. Ya sobrepasada la charca verde noto tensión en el isquio derecho y como es normal, primeras alarmas físicas, era las 4 de la tarde con una humedad importante y a pleno sol, estaba dentro de lo previsible y simplemente había que tener cuidado con las pisadas que se daban, y tras un terreno con mucha dificultad técnica comienzo la bajada del camping dirección Grazalema, el deseo de llegar al avituallamiento es enorme.
 
En un pueblo abarrotado de público y ya con 6 horas de carrera entro muy animado, Chileno me esperaba por las calles y me da ánimos antes de entrar al control, allí me informa que en el punto anterior llevaba una diferencia corta aunque pensaban que podría haberla aumentado, pero cuál es mi sorpresa que saliendo de las calles del pueblo me advierten que llevo un perseguidor a menos de 3 minutos y es Manuel de Valle, resoplo y pienso que es el más peligroso de todos, por su fortaleza física en carreras largas, por su experiencia y sobre todo que es más de allí que las piedras de Grazalema, así que tocó afrontar los últimos 28 km. a meta en una contrarreloj con el rival más duro que se podría tener ese día. En las primeras rampas saliendo del pueblo me reseteo mentalmente y cambio radicalmente la estrategia sobre la marcha.

La reformulación de la estrategia era clara, subir al Boyar rapidísimo sin ningún respiro y tirarme con todo lo que tenía hasta Benamahoma, nada de guardar y nada de ir comiendo, tocaba ir a saco, y ya en el pueblo hacer una parada larga para comer bien y otra en el Bosque para afrontar los últimos km. a meta con todas las garantías y volviendo hacer otro segmento al máximo.

“GRAZALEMA  -  META”
Desnivel +:   663 m.
Desnivel -:    1.063 m.
Distancia:     27,70 Km.
Acumulado: 82,10 km.
T. Tramo:      2:49
Tiempo:        8:47:12

La bajada dirección a Benamahoma son casi 8 km. con tramos muy técnicos y con algunas subiditas que te van rompiendo el ritmo, aún tengo mucha luz solar, rondaba poco más de la 6 de la tarde pero voy notando ya un cansancio importante que va haciendo mella en mi ritmo, incluso en un sendero muy roto por un regajo a la entrada del pueblo me tuerzo el tobillo izquierdo sin mayor consecuencia que la de un corredor ya agotado.

El avituallamiento en Benamahoma es como un oasis en el desierto, no se puede llegar ya más tieso que llegué yo, con síntomas de mareo importantes y sin ninguna fuerza,  intento comer lo que puedo, me confirman que Manu del Valle va mordiéndome los talones, paso por mi peor momento incluso moralmente, sin darme por perdido aún sabía que o llegaba liderando la prueba al Bosque o me olvidaba de ganar. A favor conocía que en la pista tendría mi oportunidad y en eso me centre, la bajada por el Río Majaceite, no es muy rápida pero no ando en ningún momento y mi cuerpo se repone, hasta el punto que la pista que te saca del cauce del río dirección al Pueblo la subo corriendo a buen ritmo, había recobrado las fuerzas. La parada última en el Bosque la hago muy rápido y mi mujer me dice que cada vez lo tengo más cerca, incluso a la salida del pueblo me está esperando el Chileno confirmándome lo mismo.

Ya en la pista giro un par de veces la cabeza, y en una de ellas cuando la visual es más amplia veo a Manuel, es cuando decido definitivamente cambiar el ritmo hasta meta, era el momento del todo o nada, y gracias a dios las dos paradas me sirvieron porque había repuesto las fuerzas y desde allí a meta voy muy rápido, ese trayecto de 11km. lo consigo hacer en poco más de 1 hora y 1 minuto que es mucho más rápido que el pasado año, incluso en las bajadas podía correr fácil a un ritmo fuerte, saliendo una media de 5:39 ese tramo con más de 400 positivo sabía que era imposible que me pillase.



TRAS 8 HORAS Y 47 MINUTOS de carrera cruzo la línea de meta cogido de la mano de mi hija Adriana con una VICTORIA muy trabajada y disfrutada a la vez, tras llevar dos ediciones anteriores consiguiendo pódium, por fín soy primero en cruz la meta. La euforia y la alegría me desbordo de ver que me estaban esperando todos los que me han acompañado a lo largo de este día, tanto mi mujer, como mi cuñados, como Juan, Rocio y muchísimo público, voluntarios y amigos, en las calles de Prado del Rey.



Con esta aventura por tierras gaditanas damos por concluida la crónica de las 50 MILLAS SIERRAS DEL BANDOLERO, siempre agradecido a todos y cada uno de los VOLUNTARIOS que hacen posible que los más de 800 corredores que surcaron la sierra ese fin de semana pudiesen realizarlo con todas las garantías, agradecer también a la organización su esfuerzo durante todo el año para conseguir que salga la carrera adelante, a mi Equipo y amigos del Running Way y por último agradecer todo el apoyo de los colaboradores.



GRACIAS A TODOS ¡¡¡¡